viernes, 29 de junio de 2012

Me preguntas...

Me preguntas cómo estoy.
Me deseas que esté mejor. 

Desde hace seis meses, tu pregunta y tu deseo se repiten con frecuencia, y yo te lo agradezco porque sé que en verdad me estimas, y me preguntas porque sigo en tu recuerdo. Tú, como yo, tampoco atinas a entender porque me tuvo que tocar a mí. 

Nunca te agradecí lo suficiente todo lo que contigo aprendí trabajando, como también ahora me quedo corta agradeciendo que aún estés pendiente de mí.

Siempre te respondo, cabizbaja, que lo voy asumiendo poco a poco y que trato de seguir hacia adelante. Perder el trabajo no estuvo nunca en mis planes y necesito aún tiempo para asimilarlo. Tú vuelves a darme ánimos y no te rindes, en unas semanas volverás a preguntarme cómo estoy.

Hoy, aunque de nuevo agache la cabeza y vuelva a contestarte que sigo intentando salir a flote, me doy cuenta que ya no soy la misma y que aunque todo volviera a su lugar, ya nada sería como fue.

Te confieso que a veces tengo miedo, que me aterra la idea del mirar al fondo del pozo y no ver más allá de la oscuridad. Miedo que es la incertidumbre de ver pasar los meses sin que llegue la oportunidad.

Afortunadamente voy llenando las horas dejando muy poco hueco a ese miedo. Tampoco dejo mucho lugar a los malos pensamientos, ya se sabe que la mente cuando no tiene nada en que ocuparse, no es que tienda hacia lo malo, es que huye a lo peor. 

Casi todos los días comienzo corriendo, recuerdo que fue tu primer consejo: "no te quedes en casa y haz deporte". Dedico tiempo al estudio como vía de mejora personal y profesional. La búsqueda diaria de un trabajo requiere tiempo, esfuerzo y dedicación. He descubierto en la web 2.0 una ventana abierta al mundo por donde puedo buscar empleo, comunicarme, formarme y estar al día en todos los temas que me interesan. Casi por casualidad, inicié este blog donde cuento mis pequeñas cosas;  me hace bien sacar fuera lo que llevo dentro, creo que agranda las puertas de entrada a una misma.


"Sin otra luz ni guia sino la que en el corazón ardía" (Isabel Guerra)
 

Tengo ganas de comerme el mundo, pero a trocitos pequeños y despacito, no sea que me atragante.

Ahora sé que las seguridades que me sostenían no eran tan fuertes como yo creía. Eran y son importantes, pero no puedo sustentar mi vida en pilares que puedan fracturarse fácilmente y me desmoronen.

Aún tengo mucho que aprender pero he descubierto que es  muy bueno que a veces la vida te ponga en situaciones que crees no merecer, sin duda te acercan un poquito al lugar de quien realmente sufre. Creo que he ganado en humildad, pero no debería ni decirlo porque la humildad ama la sombra y si se airea, se borra.

Familia y amigos me han devuelto la sonrisa y me animan cada día para que no cese en mi camino hacia adelante.

Cada minuto cuenta y no vuelve atrás y no lo puedo dejar escapar. Las cosas no vienen solas, hay que ir a buscarlas, y el trabajo no es una excepción. menos aún, estando el patio como está.

No ha cesado mi confianza en la justicia y en que uno de estos días, dé la razón a la verdad.

Me preguntas cómo estoy y si estoy más animada:


- Estoy tranquila.

Por primera vez en estos meses, puedo contestar a tu pregunta: "estoy tranquila".

Gracias Lola y hasta pronto










8 comentarios:

  1. Buena respuesta Inés, estar tranquila lo es casi todo, tener paz y encontrarse bien con uno mismo es el inicio de todo lo bueno. Sigue luchando, lo estás haciendo muy bien. ¡Ánimo! caminamos contigo :-)

    ResponderEliminar
  2. Tienes tanto corazón y tanta sensibilidad...tantas cosas buenas que ofrcernos que es imposible que no salgas hacía delante...Te Mereces lo mejor Inés...Lo Mejor...Estaré a tu laiiito Gracias Cielo por tanta Dulzura...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No me digas esas cosas que me pongo colorada. Si no fuera por vosotros... Gracias de corazón!

      Eliminar
  3. Vamos Ines! te entiendo tanto como si estuviese en tu propia piel, pero, todo pasa con tu esfuerzo y fuerza de voluntad, lo hara antes de que te des cuenta. MUCHO ÁNIMO!

    ResponderEliminar
  4. Cómo te diria Carlos,"tú puedes".Ánimo y sigue así que tendrás muy pronto tu recompensa!;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es cierto, Elena, cuánta razón tienen los niños! Muchas gracias, un beso grande

      Eliminar