lunes, 4 de junio de 2012

¿Me dice usted como se baja?


Últimamente a Juan Roig, presidente de Mercadona, le damos más credibilidad que a muchos políticos ya estén en Gobierno o en oposición. Será porque es alguien con los pies en el suelo, será porque su empresa es de las pocas que ha seguido creciendo en tiempos difíciles, será por su excelente política de Recursos Humanos, será por su apuesta por la calidad, será porque su empresa no pertenece, ¡a Dios gracias!, al sector bancario.... ¡Vaya usted a saber! lo cierto es que dice verdades como puños. Seguro que a estas alturas de día ya habéis leído y/o escuchado sus declaraciones hoy en Radio Nacional; entre otras cosas ha dicho:

"O pegamos un cambio y somos conscientes de que estamos por arriba de nuestro nivel de productividad o nos van a intervenir, esto se cumple por la ley de gravedad o por su propio peso, por cualquiera de las dos cosas, pero que va a pasar"

 "Nos hemos pasado como país treinta pueblos, incluidos los sindicatos, los empresarios, los bancos, los políticos, todo el país"

  "Creo que si no cambiamos, si no damos un cambio todos los españoles, nos van a intervenir"

Creo que la razón le acompaña, no se puede sostener por mucho tiempo una sociedad cuya mentalidad se basa en que "todo se puede comprar sin dinero". El crédito nos llevó a un supuesto estado del bienestar que estaba por encima de nuestras posibilidades. Y digo “supuesto estado del bienestar” no porque no nos lo mereciéramos, sino porque si no podemos pagarlo ¿de qué bienestar estamos hablando? Nos dieron toda clase de créditos para subir muy alto, pero se les olvidaron las indicaciones de cómo bajar sin precipitarse al vacío.

Hoy precisamente publica el Banco de España los datos de abril sobre el crédito concedido a sectores no financieros residentes (familias y empresas) Y resulta que la deuda familiar ha caído al nivel más bajo desde el inicio de la crisis. Me pregunto si esto es porque ya vamos aprendiendo la lección o es fruto del cierre del grifo al crédito por parte de los bancos.

Y es que para salir de esta necesitamos cambios sustanciales, también de mentalidad. De momento y necesariamente, como me decía mi amiga Mari, nos toca aprender a vivir bajando y para esto no nos dejaron instrucciones.


 
Dicen que las próximas semanas serán delicadas, Ojalá y al final todo sean exageraciones, pero por si acaso, no está demás hacer caso al Sr. Roig que sabe lo que dice.

¡Feliz semana!



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